Los Rams de Los Ángeles continúan intratables y extendieron su racha triunfal al aplastar 34-7 a los Buccaneers de Tampa Bay (6-5), para mejorar su marca a 9-2 la noche del domingo en el SoFi Stadium de Inglewood, en duelo correspondiente a la Semana 12 de la NFL.
El equipo angelino volvió a imponer condiciones ante otro líder divisional de la NFC, en un partido en el que su defensiva dominó por completo y neutralizó a los dos quarterbacks que utilizó Tampa Bay, el titular Baker Mayfield y su relevo, Teddy Bridgewater.
La victoria, la sexta consecutiva para los locales, coincidió con la derrota de los Eagles frente a los Cowboys, resultado que dejó a los Rams al primer lugar de la liga.
Desde el arranque, los Rams dejaron clara su superioridad. Se pusieron 21-0 gracias a un pase de una yarda de Matthew Stafford a Davante Adams. Poco después, Cobie Durant registró una intercepción que devolvió 50 yardas, y Colby Parkinson amplió la ventaja en el segundo cuarto. El dominio fue tal que Los Ángeles se fue al descanso con una cómoda ventaja de 31-7.
El receptor abierto de los Rams de Los Ángeles, Davante Adams (17), atrapa un pase por encima del safety de los Buccaneers de Tampa Bay, Antoine Winfield Jr (31), el domingo 23 de noviembre de 2025 en Inglewood, California.
(Doug Benc / Associated Press)
Stafford cerró la noche con 273 yardas y tres pases de anotación, en otro juego que aumenta los argumentos para que lo consideren como el Jugador Más Valioso. Puka Nacua brilló con siete recepciones para 97 yardas, mientras que Davante Adams sumó 62 yardas, dos touchdowns y cinco atrapadas.
Tampa Bay sufrió, además, la baja de Mayfield, quien abandonó el juego en el tercer cuarto por una lesión en el hombro, lo que puede ser más preocupante para los Buccaneers que la propia derrota. Ya había sido evaluado en el segundo cuarto tras recibir un duro golpe, y aunque regresó a la banca, lo hizo con el brazo inmovilizado en un cabestrillo. Bridgewater tomó los controles en Tampa Bay, pero no pudo cambiar el rumbo del encuentro.
Ahora, los Rams viajarán a Carolina para enfrentar a los Panthers, mientras que los Buccaneers volverán a casa para recibir a los Cardinals.





