Entre las muchas consecuencias de que cada vez utilicemos más nuestros teléfonos móviles para prácticamente todo lo que hacemos es que se acumulan todo tipo de archivos, documentos, imágenes, vídeos y más contenidos en este dispositivo. Esto hace que nos enfrentemos al problema del mensaje “Almacenamiento lleno” que provoca que nuestro móvil no funcione correctamente .
Si bien han surgido nuevos métodos que hacen que poco a poco el uso de pendrives USB decaiga, lo cierto es que son todavía muchas las personas que siguen confiando en estos pequeños aparatos para almacenar información y todo tipo de contenidos.
Uno de los inconvenientes para este método es que para pasar la información de tu smartphone a un pendrive es que tradicionalmente siempre se ha necesitado un ordenador que actúe como intermediario, debido a que los puertos de entrada de los móviles son incompatibles con USB. Por suerte la tecnología avanza para hacernos la vida más sencilla, y han surgido hasta dos formas de pasarnos la información de un teléfono a un pendrive directamente.
La primera de ellas es mediante un adaptador OTG, y es que en el caso de que ya tengas un pendrive (con el conector USB-A rectangular de toda la vida), necesitarás un pequeño adaptador. Este cable tiene un conector macho que entra en tu móvil (usualmente USB-C o MicroUSB) y un puerto hembra donde enchufas tu pendrive, lo bueno es que son fáciles de encontrar en cualquier tienda y son bastante económicos.
Tu otra opción, algo más moderna son los pendrives Duales o de doble conector. Esta es la opción más cómoda ya que son memorias USB que tienen dos cabezas: una USB estándar para el ordenador y una USB-C (o Lightning para iPhone) en el otro extremo para el móvil.
Utilizar este método no solo es rápido, sino que es ideal para viajes donde no llevas portátil o para realizar copias de seguridad de emergencia.





